¡Platos típicos del Camino de Santiago que debes probar!

Todos los países gozan de una exótica gastronomía, el Camino de Santiago no puede ser, ni por asomo, una excepción. Quédate con nosotros para conocer los mejores platos típicos del Camino de Santiago.

¡Platos típicos del Camino de Santiago que debes probar!

Al pasar por cada una de las etapas del Camino de Santiago se nos presentan un sinfín de platos típicos de cada una de las rutas que tomamos, algunas de ellas son:

Patatas a la riojana.

Quizá el más sencillo de esta lista, pero al finalizar la ruta de La Rioja descubrirás toda la calidad de esta modesta receta. Perfecta en su sencillez: patatas en guiso de chorizo, pimientos, cebolla y ajo.

Lechazo asado.

Oriundo de Castilla y León, después de probar esta receta no vas a resistir las ganas de comer más, por muy lleno que estés. Un cordero asado al horno con leñas, el chef que te prepara este plato, el cual te sirven en platos típicos platos de barro, no puede ser menos que un artista en la cocina por prepararlo.

Pulpo a Feira.

Proveniente de la bella Galicia, ¡se trata de un pulpo entero! El cual se acompaña con un buen aceite de oliva, sal gruesa y pimentón.

¡Apostamos a que para este punto ya tienes bien abierto el apetito!

Tarta de Santiago.

Al llegar a nuestro destino, la Santa ciudad del Apóstol, degustar este plato es menester.

Es una deliciosa tarta con azúcar, huevos, almendras, mantequilla y, para potenciar aún más el sabor, ralladura de limón.

Caldo gallego.

¿Quién después de un largo viaje no se le antoja un rico caldo para animar el alma? Si eres como nosotros que pensamos así, pues tienes que probar este plato de la bella Galicia.

Pocos platos típicos del Camino Santiago son tan reconfortantes como este.

Cocido maragato.

No te dejes engañar por el exótico nombre de este platillo de castilla y León, no es más que uno de los platos calientes más conocidos del Camino de Santiago, de la comarca de Maragatería, por eso lleva ese nombre.

Aunque suene algo simple: sopa de res o cerdo con garbanzos y berzas, te aseguramos que vas a querer hacer como los niños: chuparse los dedos.

¡Buen apetito!

No creemos que sea necesario decir que al viajar, sea a donde sea, hay que estar abierto a todas las posibilidades que nos brinda el viaje y, por consiguiente, el lugar destino; y la comida no está fuera de estas posibilidades.

Aprovecha tu peregrinaje y prueba cuánto puedas, ¡buen apetito! Sobre todo, una vez hayas regresado ¡cuéntanos cómo te fue en nuestros comentarios! Y si tienes un plato favorito ¡dínoslo!